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Receta de Magdalenas caseras

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Receta de Magdalenas caseras
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Receta de Magdalenas caseras

Ingredientes

  • 3 huevos
  • 200 gr Harina semi de trigo
  • 190 gr aceite de girasol
  • 180 gr azúcar integral de caña
  • 5o cl bebida vegetal o de leche

Elaboración paso a paso

  • En un cuenco donde vamos a poner la harina que ya hemos pesado, el polvo de hornear y la ralladura del cítrico que hayamos escogido. Todo esto lo removemos con una cuchara, con una varilla, con un tenedor. Lo que lo que el cubierto que prefiráis, lo mezclamos todo bien para que quede una mezcla homogénea de todo bien repartido.
  • batir los tres huevos en un cuenco, en un plato, en un tazón. El instrumento que mejor que mejor ajuste. Es importante que estén bien batidos, cuanto más batidos estén, más esponjosa va a quedar la masa de nuestra madalena
  • añadir poquito a poco el azúcar al huevo
  • añadir lentamente también la leche y el aceite, de la misma manera continuamos batiendo
  • añadir la mezcla de harina poco a poco a nuestra mezcla. Dónde está el huevo batido.
  • Cuando tengamos toda la masa bien mezclada. Va a ser el momento en que vamos a dejar reposar en la nevera durante una hora
  • tres cuartas partes del molde de papel relleno con nuestra masa y introducimos el molde de papel dentro del del metal
  • horneado aproximadamente son 15 minutos a unos 210 grados
  • Cuando tenemos toda la masa repartida entre los moldes y los moldes dentro de dos delos moldes de metal, es el momento de echarle un poco de azúcar por encima para que cuando suba la masa y se doren, quede esa costra típica que tienen las madalenas de azúcar por encima

Buenas, empezamos con una nueva receta, hoy vamos a hacer unas deliciosas magdalenas caseras. Es una receta bastante sencilla, vamos a contar como hacerla.

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Para empezar, vamos a hablar de los ingredientes. Necesitamos

  • 3 huevos,
  • 200 gramos de harina, semi de trigo,
  • 190 gramos de aceite de girasol,
  • 180 gramos de azúcar integral de caña,
  • 50 gramos de bebida vegetal o de leche,
  • ralladura de un cítrico, de limón, de naranja, de mandarina que el que tengáis en casa o el que apreciarás que creáis que más te va a gustar.
  • 1 sobre de polvo de hornear
  • y opcionalmente, si os gusta
  • 1 cucharilla pequeña de canela en polvo
  • y un toquecito, una pizca de sal,

Pasos para para preparar una sencilla receta de madalenas.

Son bastante fáciles, ya veréis. Necesitamos unos moldes de papel para meter la madalena y para echar la masa. Dónde va a crecer esa magdalena

Y si tenéis los moldes de metal que qué hacen que esa forma se mantenga Se metería el molde de metal y dentro el molde de papel con donde echaríamos la masa. Ese molde de metal lo que hace es mantener la forma cuando la masa crece y que rompa por arriba y que de esa forma típica de Magdalena.

Así que se pueden hacer con el molde de metal o sin el molde metal, pero el de papel si es necesario.

Empezamos con los pasos. El primero de ellos necesitamos un cuenco donde vamos a poner la harina que ya hemos pesado, el polvo de hornear y la ralladura del cítrico que hayamos escogido. Todo esto lo removemos con una cuchara, con una varilla, con un tenedor. Lo que lo que el cubierto que prefiráis, lo mezclamos todo bien para que quede una mezcla homogénea de todo bien repartido.

Por otro lado, vamos a batir los tres huevos en un cuenco, en un plato, en un tazón. El instrumento que mejor que mejor ajuste. Es importante que estén bien batidos, cuanto más batidos estén, más esponjosa va a quedar la masa de nuestra madalena.

En este caso, el que tenga una máquina, llámese robot, Thermomix, batidora de varillas le va a ser útil porque lo hará la máquina ese batido y la posterior mezcla de ingredientes, pero si no se puede hacer perfectamente a mano, no hay ningún problema.

Ahora es el momento de añadir poquito a poco el azúcar al huevo. Mientras vamos a continuar batiendo, ese proceso de batido lo mantenemos y aportamos el azúcar que hemos pesado esos 180 gramos lo vamos batiendo poquito a poco.

A continuación, le vamos a añadir lentamente también la leche y el aceite, de la misma manera continuamos batiendo para que todo eso se mezcle y se integre, bien sea una mezcla homogénea, todos los ingredientes bien repartidos, no haya grumos.

Después añadimos esa pizca de sal y volvemos a batir bien para asegurarnos de que la mezcla de todos los ingredientes está perfectamente mezclada. Por eso hablamos aquí, de que si tienes un robot de cocina o una varilla te estás mezcladoras, pues la mezcla será más fácil, pero a mano se puede hacer como se ha hecho toda la vida. No pasa nada.

Ahora llegamos al momento de que vamos a añadir la mezcla de harina poco a poco a nuestra mezcla. Dónde está el huevo batido.

Siempre vamos a proceder echando pequeñas cantidades de harina y batiendo para evitar que se formen grumos o pegotes

Cuando tengamos toda la masa bien mezclada. Va a ser el momento en que vamos a dejar reposar en la nevera durante una hora, tapando el cuenco que hayamos utilizado para hacer la mezcla con un film y lo dejaríamos repasar una hora.

Reposar una hora más o menos cuando llegue el momento de hornear. Calentaremos precalentar el horno a 210 grados mientras sacamos esa masa de la nevera.

Y vamos a repartir la masa sobre los moldes de papel. Entonces más o menos ponemos tres cuartas partes. Tres cuartas partes del molde relleno de masa.

Si tenéis el molde de papel, lo echáis ahí, y si tenéis el molde de metal, metéis el papel dentro del de metal. Echamos tres cuartas partes para que la masa no se salga del papel. Y porque la masa va a crecer posteriormente, entonces necesita ese espacio de papel vacío para que sobresalga luego por arriba.

Entonces resumimos tres cuartas partes del molde de papel relleno con nuestra masa y introducimos el molde de papel dentro del del metal. Se puede hacer en el orden que queráis, podéis meter el molde de papel dentro del de metal y luego echar la masa dentro. Pero yo prefiero echarlo afuera y lo coges con cuidado, lo traspasas para que no se te caiga masa por el molde de metal y se manche y luego al cocinarlo se quede pegado el papel. Pero vamos con cuidado. No hay ningún problema,

Una cosa bastante sencilla. Cuando tenemos toda la masa repartida entre los moldes y los moldes dentro de dos de los moldes de metal, es el momento de echarle un poco de azúcar por encima para que cuando suba la masa y se doren, quede esa costra típica que tienen las madalenas de azúcar por encima en el copete la parte de arriba.

Vamos con el tiempo de horneado aproximadamente son 15 minutos a unos 210 grados, pero siempre hablamos de las cocinas, de las ollas y en este caso del horno, que cada uno tenemos un horno en casa con unas características y una manera de funcionar. Entonces la primera vez tenemos en cuenta esta recomendación, pero vais a ir viendo vosotros el tiempo y la temperatura exacto que tenéis que poner conforme la vayáis a ir repitiendo. Cada horno tiene unas características y una manera de calentar.

Y el aire, la resistencia, la potencia puede variar el tiempo siempre hay que hacerlo atento a que cuando estemos esos 15 minutos horneando las madalenas, tenemos que estar atentos cada dos o tres minutos y mirar para que no se nos quemen.

Es importante no abrir mucho el horno para que no se baje la masa, viéndolo desde fuera, vale

La prueba que se suele hacer para cuando hayan pasado esos 15 minutos y creemos que están es pinchar con un palillo la madalena y asegurarnos de que ese palillo nos sale sustancia pegada y que indica que no está cocinado.

Cuando la madalena está perfectamente hecha, el palillo entra y sale y está seco.

Si es así, sacamos las magdalenas del horno y las dejamos unos 5 minutos en el molde de metal. Si es que lo hemos usado, antes de sacarlas y ponerlas a enfriar sobre una rejilla. Y nada, en cuanto estén frías pues están listas para comer.

¿Qué posibilidades nos da la madalena? Infinitas.

Podemos añadirle cacao en polvo, podemos echarle unas pasas, unos chips de chocolate por ejemplo para darle un toque personal.

Eso como el acompañamiento, pero podemos cambiar la harina que usamos en este caso hemos recomendado semi de trigo, pero podemos usar de espelta, harinas integrales o harinas blancas harinas sin gluten. Lo que pasa es que la composición y la textura es distinta. Pero podemos mezclar harinas, trigo con un poquito de centeno o maíz o un poquito de harina de arroz. Podemos darle siempre toques.

Esa es nuestra misión como cocineros de ir descubriendo hemos usado aceite de girasol, pero se puede usar aceite de oliva, lo que pasa que es más fuerte de sabor, pues igual se pueden hacer mezclas. A lo mejor echar un poquito de girasol y un poquito de oliva para que quede un poquito más de potencia de sabor. Ese aceite de oliva virgen extra.

También hemos usado azúcar integral de caña, pero se pueden usar otros endulzantes. Podemos usar sirope de agave, sirope de arce, se pueden usar melaza de arroz, incluso se podrían hacer sin ese aporte de endulzante añadiendo unas frutitas rayadas o para aclarar el gusto dulce,

El azúcar por encima, si genera esa costra y si lo retiramos simplemente no tendría costra, pero también tendríamos una madalena menos dulce para gente que no pueda tomar excesivo azúcar o no le sea recomendable.

También podemos hacer una variación en esos 50 gramos que utilizamos de leche o de bebida vegetal. Podemos usar una leche de vaca, podemos usar una bebida vegetal dentro de la bebida vegetal. El abanico es muy amplio, podemos usar una bebida de avena, una bebida, arroz, una variedad de frutos secos como almendras o avellanas, una bebida de coco que le daría otro toque.

Bueno, en esa variedad está vuestra decisión y esta al gusto que le dará, que le aportará a esa bebida vegetal, al gusto de la madalena, igualmente esa cucharilla opcional de canela. Pues la puedes echar o no en función de si te gusta el toque de canela o no, le puedes echar un toquecito de vainilla, igual una pizquita de vainilla que le daría otro toque, igual que la ralladura de limón, de naranja o de mandarina.

Pues hemos decidido abrir el abanico a ese cítrico. Pues le podrías echar o no le podrías echar. A lo mejor sustituir esa ralladura por un poquito de un zumo de naranja, variaría por la cantidad de bebida vegetal o de leche para que la masa no se nos quede demasiado liquidas. Toda esa improvisación, toda esa variación. Y proceso creativo en la cocina es el que buscamos y es el que queremos conseguir, en comedelahuerta y queremos que forme parte de ese descubrimiento culinario.

Así que aquí os dejamos esta receta básica de magdalenas caseras que esperemos que os guste mucho. Un saludo.

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