Origen del chocolate
El origen del cacao tiene lugar en América. En aquel entonces, su consumo se limitaba a una bebida a base de este ingrediente. La semilla del cacao era, también, utilizada como moneda de cambio, un uso que llegaría a su fin tras la conquista europea.
Y son precisamente los conquistadores quiénes exportan este producto y lo introducen en Europa a través de España en 1534. El monje Fray Jerónimo Aguilar envió un saco de semillas de cacao junto con la receta del chocolate a Don Antonio de Álvaro, abad del Monasterio de Piedra en la provincia de Zaragoza, dónde se elabora por primera vez en Europa.